La vaca...

Me desperté esta mañana y luego me metí a bañar, yo sabía que ocurriría algo extraño este día. Cuando salí de bañarme, me puse la toalla y justo cuando iba por el pasillo me di cuenta de que había algo extraño en mi sala, había una vaca en mi sala. Me quede parada viendo a la vaca, la vaca me miró, se empezó a acercar lentamente, cuando me di cuenta la vaca ya estaba cerca de mí. Entonces con gran impulso y valentía tuve que correr de la vaca, me siguió hasta mi cuarto, pero le cerré la puerta...ahora estoy aquí, preguntándome la manera de huir de la vaca o sacarla de mi casa, lo que pase primero.

Paz

Su último deseo fue salir, ella quería salir, ver el cielo. Ella odiaba estar encerrada en esa habitación, cuando ella supo que ya no había otra opción solo pensó en eso, irse. Ella quería irse a pasear al parque, sentarse en una banca y ver a los niños jugar mientras ella alimentaba las palomas. Ella quería ir a la playa, poner sus pies en la arena, volar un papalote ahí, bañarse y jugar mientras sus pies chapotearan el agua, le hubiera encantado acampar ahí, y ver el atardecer. Ella habría estado fascinada si en vez de estar encerrada la hubiéramos llevado a pasear a cualquier lado, ella se hubiera conformado incluso con ir una plaza comercial, donde ella pudiera caminar de un lado a otro, comprarse una nieve y comérsela mientras se sentaba en una banca y veía caminar a la gente. A ella también le habría gustado que estuviéramos más con ella, que comprendiéramos su dolor, que la hubiéramos apoyado un poco más. Ella hubiera querido ayudar a alguien, en vez de ser la necesitada. Ella no quería sufrir. Hicimos de todo, menos lo que ella quería, al final si consiguió algo que necesitaba…paz.